lunes, 20 de julio de 2009

De Ana María Patricio

Teresa, Miguel: FELIZ DIA DEL AMIGO!!!

Las canciones de Osvaldo Ramos me emocionaron y transportaron a otra época.

Soy una familiar lejana de Osvaldo. Mi madre (f) Cándida era sobrina de la madre de Osvaldo.

Para mi familia era nuestra querida y dulce "tía Carmen", también madre de Laura, de Antonio, de Gabriel, todos hermanos de Osvaldo. Felicitaciones por vuestra página y muchas, muchas... gracias.

Ana María Patricio.

De Miguel Ángel Lafuente

Hola, como les va. Sigo siempre con mucha atención vuestro blog y la historia que hacen algunos antiguos vecinos.

Como ustedes saben (ya les escribí con anterioridad) estoy haciendo una historia de Villa Adelina, de la que ya entregué una parte al Instituto de Historia de San Isidro. Un aspecto de esta historia quisiera recordar:

El 28 de mayo de 1953, mediante la resolución 81/53 del Ministerio de Transportes de la Nación, por entonces a cargo del Ingeniero Juan E. Maggi, se dispuso: "1º. Denomínase "José Martí" a la actual estación Villa Adelina del Ferrrocarril Nacional General Belgrano"... los otros artículos son de forma.

El 25 de setiembre de 1953, el Honorable Concejo Deliberante de San Isidro, sancionó por unanimidad la ordenanza Nº 2834, que en su artículo primero decía: "1º. Desígnase con el nombre de "José Martí" al actual pueblo de Villa Adelina", los siguientes son los de práctica. Por su parte, el periódico La Provincia que tenía su redacción en la calle Guayaquil 1840 (Villa Adelina) y que dirigía José Andrés Capece, en su edición del sábado 12 de junio de 1954, informaba sobre la imposición del nombre de José Martí. Hacía notar el periódico que Capece había formulado el pedido, en coincidencia con la nueva denominación de la estación ferroviaria.

También el diario La Nación publicó, el 26 de enero de 1953 una nota de Adolfo Mitre, la que tituló Martí y nuestro país, y decía: "El 13 de setiembre de 1882 este diario publicó el primer artículo de los muchísimos que durante una década escribiera quien, muy poco después fue designado corresponsal permanente en los Estados Unidos. Su última nota (de José Martí) fue del 20 de mayo de 1891..."El miércoles 28 de mayo de 1953, en la página 1, columna 1, el diario de los Mitre decía: "A José Martí se le rendirán hoy homenajes. Una plaza de la ciudad llevará el nombre del prócer cubano..."El día del centenario del nacimiento de Martí (28 de enero de 1953) diversas instituciones culturales y del ámbito universitario, así como la Academia Nacional de la Historia, lo recordaron con actos de homenaje.

Como recordarán antiguos vecinos, la estación tenía los respectivos carteles con el nombre de José Martí. Pero, como sabemos, el 16 de setiembre de 1955, un golpe de Estado, hizo desaparecer el nombre de la estación y de nuestra Villa. Creemos que se trató de una arbitrariedad surgida del decreto-ley 4161 que llevaba como título "Prohibición de elementos de defensa y afirmación ideológica o de propaganda peronista", desconociéndose quizá que Martí se había muerto el 19 de mayo de 1895, es decir 65 años antes. Por entonces el país mantenía relaciones diplomáticas con el dictador Fulgencia Batista.

Quizá podríamos referirnos sobre algunos aspectos más de la personalidad de Martí: fue colaborador de una veintena de periódicos del continente, socio corresponsal en Nueva York de la Academia de Ciencias y Bellas Artes de San Salvador; representante de la Asociación de Prensa de Buenos Aires en Estados Unidos y Canadá, Cónsul de la Argentina, Uruguay y Paraguay, también en Nueva York, Presidente de la Sociedad Hispanomaericana, e incluso representante del Uruguay en la conferencia Monetaria Internacional Americana (Washington, 1891) y como ya dijimos corresponsal de La Nación y mantuvo una estrecha amistad con el general Bartolomé Mitre, para cuyo diario escribió más de 100 notas.

A nosotros nos extraña que el nombre de una casi desconocida, como es Adelina Drysdale Munro, ajena por completo a nuestra historia (que jamás pisó ni la estación ni esta Villa), prevaleciera por el del prócer latinoamericano. Finalmente: recordamos que Adolfo Mitre desde el diario de su dirección dijo: "José Martí, prócer de América, cuya vida no figura en las páginas de nuestra historia".

Estimados Teresa y Miguel: creo que todo esto es un poco extenso, lo dejo a la consideración de ustedes. Todos los documentos aquí mencionados se encuentran a su disposición, así como la fotografía, tomada en nuestra estación, de una locomotora a vapor, (modelo inglés de 1843) que estimamos es de 1912 y conducía Florencio Núñez Gordo, cuyos descendientes viven en Villa Adelina.

Les deseo mucho exito y que sigan informando a nuestros vecinos de la interesante vida de nuestra Villa Adelina.

Cordialmente,

Miguel Angel Lafuente
Blas Parera 1788 (V.Adelina)
4765-8863

sábado, 11 de julio de 2009

Otro aporte de Horacio Barros

De: horacio pedro barros
Fecha: 07/08/09 23:27:52
Para: recuerdosdeadelina@gmail.com
Asunto: fotos...

Soy Horacio Barros adjunto mis fotos de la escuela primaria y fotos de mi epoca de colectivero en la linea 333.

Por razones de tiempo hace mucho que no entraba al blog y me dio mucha alegría su convocatoria y vemos cosas muy lindas de gente como el cantor de tangos que fue amigo de mi hermano. Vivía en una casa ferroviaria en la estación de Villa Adelina para el lado de Capital de lado de Panamericana frente a donde hoy esta la terminal del colectivos 71.

También la canción de Paloma Valdéz, les cuento quién fue su representante: fue Luis Formento -tío de Jorge Formento-, el de Domingos para la Juventud. Luis vivió pegado a mi casa. Periodista de raza, escribía en el diario La Razón en la parte de atrás, abajo de la página de chistes. Allí salían muchos chimentos de la farándula y bueno -él formaba parte-, pasaron muchos conocidos. Tengo yo muchas corbatas de Ante Garmaz que él se las regalaba y algunas me las pasaba a mi también.

Creo que al actor que salió allí lo recuerdo como compañero de escuela por ello mandé las fotos de la primaria, por allí alguien se ve y me escribe.

Bueno, gracias por este recuerdo y crean que hasta se me cae una lágrima al escuchar el recuerdo de Paloma. Amigos: espero que algún día pasen por Mardel y me visiten par alimentar estos hermosos recuerdos.

Hasta siempre.































Si alguno esta en alguna foto escribirme a horacio.barros@hotmail.com


Para ver las fotos ampliadas haga doble click sobre las mismas.

sábado, 4 de julio de 2009

Osvaldo Ramos

Por Miguel Recuerdo
Cantor, compositor y poeta (13 de mayo de 1933)

Nombre real: Ubaldo Pedro Santieusanio

Otro nombre artístico: Osvaldo De Santi

Nació en la localidad bonaerense de Villa Adelina. Es el anteúltimo de los cinco hijos del matrimonio formado por Carmen Rodríguez y Domingo Santieusanio.

Fue, por su estilo y color de voz, el cantor ideal para reemplazar a Jorge Valdez en la orquesta de Juan D’Arienzo. Tenía potencia, buena dicción y era muy afinado.

Con apenas 15 años, comenzó a manifestarse su vocación por el canto dando muestras de sus condiciones en reuniones familiares y grupos de amigos. Un día, participó en un concurso de jóvenes valores en la localidad de Munro, Provincia de Buenos Aires, y lo ganó. Ese mismo año, 1948, debutó en el cuarteto del bandoneonista Beliera, conjunto que animaba reuniones bailables en clubes de Don Torcuato, Villa de Mayo, Los Polvorines y pueblos aledaños.

Vecino del bandoneonista Orlando Vitullo, director de un cuarteto de la zona, participaba en los ensayos del grupo y, de esa manera, acrecentó su formación musical y perfiló su estilo.

En 1951, resultó ganador de un concurso de mayor importancia, en la confitería "La Armonía" de la calle Corrientes, a causa del cual consiguió un contrato por dos meses para cantar acompañado por las guitarras de Olmos, Medina y Francese.

Luego de cumplido el servicio militar, interrumpió un tiempo la actividad retomándola, en 1956, en la orquesta Romero-Spinelli, donde adopta el seudónimo Osvaldo De Santi. Con esa formación actuó durante dos años en diversos locales bailables: "El Palacio Güemes", "Salón Colegiales", "Salón Urquiza" y en bailes de carnaval. De buen repertorio, se lucía con los tangos: "Remembranza" y "Lágrimas de sangre", entre otros.

En 1958, Leopoldo Federico le propuso incorporarse a su orquesta, para ocupar la plaza que dejara vacante Hugo Marcel. Debutó en un club de la localidad de Matheu y, poco tiempo después, actuaron en los bailes de Carnaval del Club Atlético Boulogne. También, en Radio Belgrano y Canal 7 de televisión, en la confitería Richmond, y en giras por el interior del país.

Luego, pasó a la orquesta de Alberto Mancione, presentándose por Radio El Mundo, Canal 11, "El Palacio Güemes" y en muchos clubes.

En 1960, ingresó a la de Florindo Sassone. Ocupó la plaza del cantor Alberto Fontán Luna. Realizaron presentaciones por Radio El Mundo y en televisión. A su vez, actuaron en "Patio de Tango" (ex La Armonía) y en el "Marabú". También, participó en una gira por el Uruguay. Y, el 21 de junio de 1960, llega al disco por primera vez con el tango "Esclavo de tu piel", de Lucio Demare y versos de Alberto Martínez. Luego vendrían 5 registros más con Sassone.

En 1963, fue llamado por Aníbal Troilo para incorporarse a su orquesta. Lo había escuchado cantar con Sassone en el Primer Festival de Tango de La Falda (Córdoba) y lo necesitaba para reemplazar a Roberto Rufino. La propuesta le llegó a través de Osvaldo Berlingieri, quien junto Ernesto Baffa, realizaban actuaciones extras en un cabaret cercano a Radio El Mundo, emisora donde actuaba Osvaldo.

Pero esto no se dio por una charla con Francisco Mele, colaborador de Sassone, quien le aconsejó continuar un tiempo más con el director porque presentía otras propuestas. Hasta que un día de 1965, Juan D’Arienzo lo invitó a hacer una prueba. Había que cubrir el lugar de Jorge Valdez.

El propio director, Juan Polito, Carlos Lázzari y el representante Emilio Curi se encargaron de la selección, que se realizó en Radio El Mundo. Era una terna que completaban Juan Carlos Godoy y Alberto Cuello. Osvaldo fue el elegido y D’Arienzo le hizo cambiar el apellido artístico y, a partir de ese momento, se convirtió en Osvaldo Ramos.

Actuaron en las radios Splendid y El Mundo. También, en "Sábados Continuados", con la conducción de Nicolás Mancera, en Canal 13 y en "Yo te canto Buenos Aires", con Julio Jorge Nelson (Canal 11).

En agosto de 1965, grabó "Sentimiento gaucho" y, en 1967, apareció con la orquesta, en la película "Una ventana al éxito", donde canta "El tren de las ocho". Realizaron giras por Uruguay, por el interior del país y, en 1970, se presentaron en "Michelángelo" y en el "Chantecler". Con "El Rey del Compás" grabó en total, alrededor de 70 temas.

En 1971, D’Arienzo con sus tres cantores: Armando Laborde, Alberto Echagüe y Osvaldo Ramos, actúa el Teatro Odeón, en una revista de tango, compartiendo cartel con Tito Lusiardo, Roberto Goyeneche y Alba Solís.

Como había poco trabajo para el tango, el director permitió a sus músicos que alternaran con otras posibilidades de actuación, así nació en 1973, "Los Solistas de D’Arienzo". Ese mismo año, grabaron para Music Hall, pero con el nombre "Los Solistas", por compromisos contractuales de D’Arienzo con el sello Victor. Al margen de ello, en 1975, Ramos grabó dos temas con el conjunto de Dante Smurra.

Fue cantor de la orquesta hasta el fallecimiento del maestro, registrando 58 temas solo y 9 en dúo con Armando Laborde. Entre sus creaciones más destacables: "Bailate un tango Ricardo" y "El Bar de Rosendo", de Ángel D’Agostino y Enrique Cadícamo.

Con "Los Solistas de D’Arienzo" y junto a Alberto Echagüe actuaron en el programa "Grandes Valores del Tango", en Canal 9, realizaron giras por el interior y, en 1978, otras por Colombia, Perú, Brasil y Uruguay.

En 1985, volvió a grabar, en esta ocasión, con el cuarteto de Mario De Carlo y con la orquesta de Omar Valente, y entre 1993 a 1997, con "Los Dandys del Compás". Es autor de los tangos "Bailarín milonguero" y "Corazón de poeta" con Antonio Spinelli; "Mi vida yo la reviento" con Ernesto Franco; "Nuestro amor es pecado" con Carlos Lázzari; "Hoy Momo hace reír", "Ha partido mamá" y "Un papel en el viento" con Normando Lázara; "Bésame y abrázame" y "Plegaria para un hijo", con Carlos Lázzari y Miguel Ángel Pepe; "En el mismo bar" con Ángel Di Rosa, "Mariposa mentirosa" con Miguel Ángel Pepe y Di Rosa, "El pan que repartió”, con Mario De Carlo y Miguel Ángel Pepe; y los valses "Y me enamoré de ti" y "Cuenta nueva" con Mario De Carlo.

http://www.todotango.com/spanish/creadores/oramos.asp

jueves, 2 de julio de 2009

Recuerdos de Carlos A. Muñoz

C.A.Y.D.A.

El Club Atlético y Deportivo Avenida comenzó sus actividades creo que en el año 1940/1941. Estaba ubicado en un terreno de la familia Cociancich, Avenida Bernardo Ader entre Las Acacias –hoy Soldado de Malvinas- y Los Plátanos.

En sus comienzos, estaba la pista de baile, que también servía para campeonatos de babi futbol, patinaje, bailes infantiles de carnaval, etc. Era muy modesto, y sus costados estaban cerrados por cuadrados de madera con papel pintado. El escenario era casero, y la casona que servía de buffet y salón para socios y juegos de salón –cartas, ajedrez, dama, dominó, generala, etc.-, tenía una galería donde se ubicaba la gente para ver los partidos de babi.

Algunos directivos fueron: Cociancich, Muñoz, Méndez, Pelayo, Don García (un español muy simpático, siempre con su señora, que vivía en la esquina de Ader y Ucrania), y otros, es decir, vecinos "sin fronteras" de la avenida Ader…

Los bailes eran con "selectas grabaciones", y como era muy familiar, era posible ver a los hijos bailando con los padres. El equipo de audio, era un tocadiscos común con un brazo que tenía una púa, que surcaba el disco de pasta (no había otro en ese entonces), con dos parlantes que se acoplaban cada tanto, y un micrófono montado sobre un soporte de caño. Mi padre, que era electricista, se ocupaba de arreglarlo cuando se descomponía.

El locutor-animador-organizador, era mi padre, Don Muñoz como le decían todos. Es un orgullo para mí que hoy, a más de 60 años, lo sigan recordando como un gran bienhechor a favor de los niños que, como bien dijo Marta Milec, se hubiera merecido un monumento….

Por ese entonces, el equipo de futbol de primera reforzado con otros jugadores, jugó un partido de futbol con un Club de Los Cardales. Fuimos en camión y llegar fue toda una odisea: camino de Bancalari y luego la entrada por tierra (huella más bien), hasta una cancha que estaba a más o menos 3 cuadras antes de la estación, viniendo desde el río. Hoy esa cancha no está más, pero en ese Club jugaba Alfredo Distéfano y su hermano (ver testimonios en el Bar Di Yorio que está frente a la estación Los Cardales). Nos esperaron con un asado, y después del mismo se jugó el partido.

No recuerdo en que año, pero alrededor de 1945, el club cerró sus puertas y todas las cosas trasladables vinieron a parar a mi casa, a un galpón; es decir mi casa de Piedrabuena 1469 se transformó en la sede del Club. Intervino en campeonatos de futbol de la Liga del Norte (Florida hasta Del Viso), con equipos de Primera y Tercera.

Creo que por el año 1946, reabre sus puertas en lo que era la parte Box del Bar Avenida de Antonio Domínguez, ubicado en Fernández Espiro (lado de Vicente López, hoy Paraná) casi esquina Cajaraville, con vecinos como: Piñeiro (carnicería), Antonio Pita (almacén), Rodolfo Beltrame (verdulería), Manuel Muñoz, Martínez, López, y otros, y ahí continúan con boxeo (poco tiempo), pista de patinaje, bailes infantiles en carnaval, gimnasia, partidos de babi futbol, bailes con discos y con orquestas, espectáculos circenses, de las comunidades españolas e italianas, obras de teatro (daba clases el señor Tito Licciardoni). Fue el primer Club que trajo a Alberto Castillo, justo cuando estaba filmando Adiós Pampa Mía (vino con un Studebaker que era sensación); también actuaron: Miguel Caló, Francisco Rotundo, entre otros.

Para los carnavales, se organizó, además, un conjunto representativo del Club, con las chicas vestidas de patinadoras (botas blancas, pollerita blanca lo mismo que la blusa, capa celeste y gorro tipo granadero), y los hombres con pantalones y camisas blancas y capa celeste. Se visitaban los clubes vecinos, desde Florida hasta Boulogne, en prueba de amistad y trasladados en la caja de carga de un camión.

Paralelamente, en la parte libre de la manzana Piedrabuena-Las Acacias-Guayaquil-Los Plátanos, se hizo la cancha de futbol y también una tribuna chica que construyó mi padre. Francisco Rotundo y su orquesta en pleno, trabaron amistad con la comisión directiva y sus familias, a tal punto que se organizó un partido de futbol entre la orquesta y los directivo del club (para la orquesta atajaba el cantor uruguayo Enrique Campos). Después del partido, el tradicional asado.

En el equipo de primera, jugaron José Méndez, Ángel Pérez, Roberto Pérez, Gumersindo Pérez, Horacio Pérez, Juan Carlos Almirón "Chacarita", Blanco, "Tanguito", "Coco" Blanez, José Menegato, Juan de la Colina, "Poroto" Barzola, Eduardo Reynard "Marante", Heredia, entre otros.

Había cierta rivalidad con los equipos de la zona, pero como mi viejo había aglutinado tantos chicos de todos los sectores, todo se diluía. De esa época surgieron jugadores como: Fraile (jugó en varios clubes), Monserrat (el pelado), Néstor (5 tradicional, sobrio, jugó en varios clubes), Jaime Pérez (muy buen jugador), Roberto Pérez (jugó en Huracán), Carlos Rómoli "Cafúa" (jugó en Boca), Juan C. Almirón (jugó en la primera de Huracán), Hugo Heredia (jugó en la primera de Boca), y muchos otros.

El equipo de futbol de menores (puede haber sido menores de 17 años), que integraban entre otros: Miguel Méndez, Monserrat, Juan C. Almirón, Martinito, Carlos Podestá, Carlos Muñoz, entre otros, salió campeón de Vicente López Categoría A, ganando en la final a Boca Juniors de Florida. Vestía la camiseta de Racing y era dirigido por Don Muñoz El partido se jugó en la cancha del Club Banco Nación (al costado de la Avda. Gral. Paz), y aún conservo un recorte del diario que publicó la foto del equipo.

Aproximadamente en el año 1953, cierra sus puertas definitivamente el Club Avenida. A partir de allí, Don Muñoz se traslada al UVVA donde sigue organizando actividades infantiles, con el infaltable "carnaval infantil" que siempre terminaba a eso de las 20 horas con una tarantela.

También en el UVVA hacen teatro, basket, entre otras actividades. No recuerdo cuanto duró esta instancia, pero luego pasó al CASVA, prosiguiendo con sus actividades infantiles. También es de destacar la labor del matrimonio Zuviría, que enseñaba folclore a jóvenes y adultos, y colaboraban con mi padre.

Es precisamente en el carnaval de 1955, cuando mi padre asiste por última vez a un baile infantil; ya enfermo, y desatendiendo los consejos médicos, consigue hacerse presente y saludar a todos los chicos. Fallece el 10 de Diciembre de 1956, a la edad de 48 años. Con mucho dolor he tratado de recordar todo esto, y lo he hecho en un homenaje que no tendría que haber provenido de mí.

Carlos Alberto Muñoz